Recomendaciones sobre acciones escalables que los comerciantes pueden adelantar para mitigar estos riesgos.
Por: Cesar Augusto Cardona, CPP.
Bogotá D.C., 22 de febrero de 2024
Mucho se ha escrito sobre lo que ocurre actualmente en Bogotá y otras ciudades, donde los maleantes se han dado a la tarea de atracar a plena luz del día a desprevenidos comensales dentro de restaurantes y cafeterías, logrando aumentar el miedo de la gente por su exposición a esta clase de riesgos, que se suman a los atracos continuos para llevarse un celular, una bicicleta, el morral de los estudiantes en el sistema de transporte público, además de los escandalosos casos de feminicidios y fleteos. Y como si todo lo anterior fuera poco, debemos registrar los incendios provocados, y las continuas marchas y bloqueos de tinte político, que se ambientan con vandalismo.
Todo un coctel de riesgos y peligros, que enferma y angustia. De allí que los ciudadanos, en su mayoría, padezcan de estrés y salgan de sus casas a trabajar o estudiar con miedo y prevención creciente, rayando con la paranoia.
Las autoridades ya demostraron que no cuentan con la capacidad para proteger a los ciudadanos. Y los ciudadanos no podemos quedarnos de brazos cruzados, esperando no ser víctimas de los delincuentes. Por ello, queremos compartir, desde nuestra experiencia, una serie de recomendaciones de seguridad que ayuden a mitigar el riesgo de sufrir la acción de los maleantes. Y en esta oportunidad, queremos enfocarnos en los restaurantes y otros establecimientos públicos, con el fin de que los dueños de estos negocios apliquen una serie de controles y contramedidas escalables, que puedan desestimular esta práctica delincuencial y ofrecer unos mínimos de protección a sus clientes:
1. Instale un sistema de cámaras de seguridad, preferiblemente inalámbricas, que le permitan vigilar su negocio 24/7 a través de internet. Esto también le permite identificar plenamente a las personas que ingresan al establecimiento y vigilar el entorno externo. Coloque letreros visibles sobre esta medida.
2. Destine una persona que vigile en horas pico la pantalla o dispositivo donde están reflejadas estas cámaras, y que disponga del teléfono del CAI más cercano para alertar a las autoridades en caso de ser necesario.
3. No permita el ingreso de personas que tengan la cabeza cubierta con cascos. Coloque avisos visibles sobre esta prohibición. Para esto, debe destinar una persona que reciba a sus clientes en la puerta.
4. Instale un control de accesos con una puerta o cadena robusta al ingreso, a través del empleado destinado para este fin.
5. Conforme con sus vecinos y otros negocios, un frente de seguridad y, hasta donde les sea posible, contraten guardas de seguridad privados, externos, armados y suficientemente entrenados que vigilen una calzada o una cuadra alrededor de sus negocios.
6. Capacite a sus empleados en la Gestión de Riesgos con un consultor autorizado en la materia, sobre las actividades de control de seguridad establecidas, a fin de brindar tranquilidad y confianza a sus visitantes, y que sepan cómo actuar ante una situación de atraco o atentado dentro de sus instalaciones.
De la aplicación de éstas y otras medidas preventivas que desestimulen la confianza que se tienen los delincuentes, dependerá la subsistencia de su negocio. ¡Actúe ahora!
Contamos con los conocimientos y una amplia experiencia para ayudarle.